La caída del sol nos dio la bienvenida en Campos de Ibarlucea, donde Guille fue recibiendo a cada uno de los invitados mientras el cortejo se preparaba para anticipar la llegada de Romi. La ceremonia escapó a la seriedad y nervios típicos, con Romi y Guille auténticos como siempre, riéndose y disfrutando momentos que hoy vale la pena recordar.
Pasada la ceremonia, los livings se poblaron dentro y fuera del salón y, en cuestión de minutos, arrancó la fiesta!! El saco de Guille duró poco (nada), las corbatas de los invitados se transformaron en vinchas, y el descontrol invadió la pista… a las 11 de la noche!! Hasta las 5 de la mañana nadie dejó de bailar, saltar y festejar de la mano de Romi y Guille, que contagiaron a todos con su energía para llegar al final de la fiesta con ganas de seguir celebrando…
Felicidades Romi y Guille, mil gracias por todo!!!Muchas gracias Luis Rostan y Leilen Tomás por la ayuda!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario